Desestimé la opción de estudiar ingeniería mecánica y me decanté por la especialidad de electrónica en telecomunicaciones, decisión que con el paso de los años, me he dado cuenta de que fue un gran acierto.
Esto me ayuda a ver los problemas y averías de automoción desde un punto de vista muy distinto al que normalmente se tiene en un taller. Permitiéndome ayudar a los técnicos y jefes de taller, precisamente en los problemas en los que más ayuda necesitan, como averías eléctricas, estudio de diagramas eléctricos, uso de equipos de diagnosis y osciloscopio.